Cálculo y relato: el campo de batalla de la política actual.
En política, el cálculo se ha transformado en la brújula predominante. No se trata de una estrategia basada en convicciones, sino de actuar según la dirección de la ola: sumarse en el momento exacto en que la opinión pública está del lado de cierto tema o figura. No es un pensamiento profundo ni una visión de país; es, más bien, supervivencia política. Este cálculo oportunista no evidencia coherencia ni liderazgo, sino una habilidad para adaptarse al clima del momento, aunque ello signifique renunciar a principios. La sociedad se vuelve juez, motor y, al mismo tiempo, objeto de manipulación, y en ese contexto vale recordar que “el amor por la patria no es patrimonio exclusivo de ninguna fuerza política”. Ese debería ser el punto de partida de cualquier decisión, y no las etiquetas ni las modas mediáticas. A esto se suma un problema estructural en los partidos políticos. A marzo de 2025 existían 23 partidos constituidos legalmente en Chile, con un total de poco más de 500.000 militantes...